Se hizo el primer
taller del año con los pibes y las pibas del bachi. Los estudiantes de Madres
aportaron y llevaron adelante este laburo, con mucha capacidad y
responsabilidad, pero con algo sumamente importante, la alegría y la
convicción.
En este camino vamos
andando, sembrando esperanzas y revolución aunque digan que esta devaluada.
Creemos que es el sendero por el que hay que ir transitando, el de generar
conocimiento colectivo y popular. Recuperando la sonrisa y sobre todo la
conciencia de que podemos transformar el mundo, pero antes debemos conocerlo.
A pesar del mal día,
nublado y lloviznoso, ahí estaban todos, con la curiosidad y el encontrarse con
el otro, que esta ahí al lado tan cercano que no lo reconozco, tan lejano que
se me desdibuja. Y ahí en ese instante nos acercamos a la vida y sus
maravillas, para ser libres.
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