Año 2008
Los pibes son esos que siempre andan o terminan enredados en alguna historia policial, no por que se predispongan a hacerlo, es casi una regla. Lo que habría que ver es: ¿quienes imponen esas reglas y para que? La pregunta no tiene mayor relevancia, es sencillo, pero cuando entramos a ese mundo sórdido y de contenidos oscuros. Nos topamos con gente, que no son los pibes y vemos a los pibes en el último peldaño de la cadena de responsabilidades. Esto quiere decir que los pibes son victimas, de aquellos que se esconden detrás de cualquier nombramiento, cargo o lugar privilegiado de la sociedad. Y les posibilita maniobrar con total impunidad y hasta son capaces de colaborar con un hogar de pibes. Es el colmo de la hijaputes, pero es como se mueven encaramados al poder y lo ejercen no titubean.
Mientras los pibes hurguetean en la basura de los contaminadores Ceamse, buscando un pedazo de comida podrida, que le haya sobrado a la media clase que apesta de orgullo y falsedad. Los pibes van a la carrera y en una hora deben alcanzar el objetivo, juntar la comida, para ellos y sus familias. Es una carrera muy loca; donde hay para que coman 300 millones de persona, los pibes van a la carrera buscando un poco de alimento vencido, no por el tiempo y si por la vergüenza a tamaña desigualdad.
Los pibes del infierno, los pibes del encierro, los pibes de los fierros, un día no van a estar más ¿y a quién le puede importar? Los pibes del pasillo, los pibes de San Petersburgo, los pibes de Villegas, de Puerta o del 22 ¿y a quién le puede importar? Debería importarnos a todos en realidad por que los muertos se empiezan a sumar y la vida no vale más que una rebanada de pan. La indiferencia y la discriminación son solo un caldo chirlo y frio de dolor.
Se acercan
se acercan
furiosamente
un sonido
ensordecedor
son las bandas
de pibes
que acorralan
la ciudad
que la despiertan
del letargo
del legado
de media oscuridad
se acercan
velozmente
y al parecer
sin disimulo
tomando
las veredas
las avenidas
las calles
diciendo
que el futuro
ya paso
y que hoy es hoy.
las culpas
toda la culpa
se desparrama
sobre los senderos
que conducen
a los jóvenes
todas las culpas
se van enfilando
para un lugar
que no es pecado
y sin embargo
es peligroso
ser joven
más peligroso
es ser negro
y más peligroso
es ser pobre
toda la culpa
se llena
se indica
se los señala
a aquellos
que no han tenido suerte
¿pero que es eso? ¿la suerte?
una condición
que los hace peligrosos
por ser jóvenes
peligrosos
por ser negros
peligrosos
por ser pobres.
Dos chicos
Dos chicos que quemaron culpas,
las culpas de millones,
clavando afilados cuchillos,
en ciertos corazones.
La soledad y la angustia,
la atornillaron de por vida,
que ni la muerte destruiría
solo la vida recomenzaría.
Algunos lavan causas,
y otros se refriegan el alma,
con la tristeza hecha llanto.
Dos chicos quemaron culpas
de la sordera funcionaria,
del aparato traga tripas,
que degluten con vino sanguíneo.
La tortura y el engaño
que se van a cuidar del espanto,
si no le importa el ser humano,
se sostiene de la ruina,
con la ley que encarcela y mata.
Dos chicos quemaron culpas
y extendieron sus alas al infinito
sin siquiera haber probado
ni un poco de felicidad.
Se escaparon, se marcharon
quien sabe por que designio
y en el arrebato;
se llevaron mi alma al diablo,
al diablo, al diablo, al diablo.
Dos chicos quemaron culpas
que eran de otros, no eran suyas
y desde sus cortos pasos,
jamás serán olvidados;
La sonrisa, la osadía,
La simpleza, las miradas,
quedaron bien guardadas
y a salvo, como plegarias,
de la muerte enamorada
que transita y anda
la buenos aires desolada.
194
194 murieron
y todos se rieron
194 se murieron
y solo fue fatalidad
194 se murieron
y nadie pagara
194 se murieron
sin llegar al futuro
194 se murieron
por culpa del sistema
194 se murieron
por la corrupción
194 se murieron
para encender el cielo
194 se murieron
para que reaccionemos
194 se murieron
para teñir la ciudad
194 se murieron
para que el mundo no deje de serlo
194 se murieron
¿y que pasa con los cerdos?
194 se murieron
194 volvieron
194 nacieron
pero nunca serán
los 194 que murieron.
En nombre
Las rejas y el encierro
son un eterno duelo
que es único para morir
siendo nada para contar
solo horas
solo días
solo años
de ansiar la libertad
de aprender a sobrellevar
las rejas y la oscuridad
para salir a matar o morir
en un intento
por querer vivir
las rejas y la soledad
son para sentirnos
un poco mármol
y masticar la bronca
con resentimientos
que matan
que hieren
que lastiman
en esa soledad
donde no hay nadie más
en nombre
de las buenas cosas
rejas y balas
para que no se entre
en la sociedad
en nombre
de las buenas cosas
no hay más que matar.
Una cuerda
Una cuerda
un libro
unos barrotes
y el frío
tan helado
que cruza todo
el cuerpo
y hace soñar
los huesos
una cuerda
un libro
un oficial
y el calor
que se sube
de repente
a la cabeza
que deja
de mirar
la cara de mamá
se va borrando
y el oficial
se termina yendo.
Los primeros
Los primeros ojos
se abren a la vida
a esa primera
que ensueña
pero no tarda
en acurrucar
la sensación
en una señal
no hay leche
no hay comida
y los ojos se nublan
se palidecen
el rojo se borra
el celeste
y el amarillo se mueren
queda el marrón
queda el gris
y un color indefinible
los primeros ojos
parpadearon
y lo maravilloso
se convirtió en fango
la pelota atascada
volando a otro lado
mientras suena Lezcano
los primeros ojos
ya se cerraron
sin compasión.
Dentelladas
Dentelladas
de perros
en la oscuridad
que te abriga
y te oculta
de la intemperie
que juega
con la billetera
fresquita caída
de una salidera
el vaso de plástico
de gaseosa
con un poco de hielo
y mucho vino
se confunde
en el humo
de la desesperación
las pastillas ruedan
con gracia y elegancia
pero enseguida
se ponen agreta
se borra
toda expresión
de humanidad
y se desdobla
un supermen
caño resuelto
esperanza moribunda
-silencio alguien viene
córrete juan vamo a laburar.
La ida
Una camioneta
nos viene a buscar
es blanca grande
y esta re-buena
nos llevan
a dar unas vueltas
nos dicen
los hombres
que manejan
si queremos algo
les decimos de todo
y nos dicen bueno
pero algo
van a tener que hacer
estamos en un barrio
que jamás había visto
ni por la tele
me va pasando el hombre
una cosa negra
con mango de madera
al principio no sabia que era
pero después
una vez en mis manos
ya sabia que era
-pibes tienen que entrar
a esa casa
no hay nadie
se traen todo lo que haya
bicicletas
televisores
computadoras
joyas
ropa
zapatillas
lo que quieran
y se vienen corriendo
a esta esquina
suben y nos vamos
estamos
y lo que quería
se alejo tanto
que en este encierro
no tiene sentido solo
el recuerdo
de haber tocado
por un momento
el cielo.
El viento desesperado
Barriletes
que no vuelan
desesperado
el viento
de no poder lograr
lo que debe soplar
nada se eleva
se quedan acá
sin alas y sin sueños
despojados de todo.
Pero el vuelo
aún esta
en la memoria
de los que andan
aleteando
coraje
miradas
y disparates.
Los pibes
sin sueños
todavía están acá
y algún día
van a volver a soñar
van a volver a jugar
van a volver a amar
van a volver a la inocencia
van a volver a asaltar
el cielo
la tierra
el mar.
Niños felices
Niños felices
que desconsuelo
nadie quiere sonreír
todo es tan gris
y miserable
que no se puede
ni respirar
niños felices
que vanidad
las campanas nuevas
irán a sonar
la soledad
la tristeza
de los niños
que no saben
a donde ir
una pelota de trapo
un lápiz
un garabato
de donde apenas
se ve el nombre
se asoma
del alfabeto muerto
que escriben
los niños felices
con tinta
de su propia soledad.
Frases
Frases y millones
millones y frases
que se van
por el retrete
de la historia
cuando matamos
el mañana
en la calma
de la mañana
cuando matamos
el mañana
en la calma
del medio día
cuando matamos
el mañana
en la calma
de la tarde
cuando matamos
el mañana
en la calma
de la noche
siempre matamos.
Sangre
Acostumbrado
al sabor de la sangre
que brota de la boca
como un torrente
y no para
a veces
es el estómago
otras son los pulmones
depende donde
me pegan las balas
un brazo
una pierna
pero ahora
no se donde
me dieron
estoy volando
estoy mirando
estoy muriendo
y la sangre
se hizo un río
con mis hermanos
que ya se han ido.
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