miércoles, 20 de enero de 2010

La Reducción del daño.

La Reducción del daño.

No es tan sencillo lograr entender y menos tratar de comunicar y hacer conocer que es la disminución del riesgo. En una sociedad donde la culpa determina y condiciona. Donde se penaliza a las victimas y se premia a los “vivos” que se aprovechan de las situaciones para su beneficio propio. Lo loco y descarnado de esta realidad es que están en juego vidas humanas donde se vulneran sus principios básicos(los derechos humanos).

El uso indebido de drogas tiene múltiples factores que no se pueden reducir a una unidad o plantear que es una enfermedad. Es una complejidad de circunstancias que se van conformando desde diversos acontecimientos, sociales culturales, económicos, psicológicos y políticos. Es aquí donde la salud toma una dimensión de derecho y garantías, y justamente allí donde convergen y repercuten las consecuencias del deterioro. Podríamos plantearnos un enfoque reduccionista lo que esta bien- lo que esta mal, la salud- la enfermedad, el que puede y el que no puede, así una innumerable lista de opuestos que no conducen a nada y que simbolizan la represión como medio de lograr un orden, escondiendo la ropa sucia que todos producimos.

“Los Países Bajos han estado orgullosos de la manera en que enfocado el abuso de sustancias, especialmente del éxito del Programa de Reducción de Daños. Sin embargo, incluso en nuestro pequeño país las opiniones respecto a la política sobre drogas son diversas, desde aquellos que consideran que “se hace lo correcto” hasta los que consideran que se está en el “camino erróneo”, argumentándose razones completamente diferentes en cada posición. El principal objetivo de la política holandesa sobre drogas ha sido siempre la protección de la salud del consumidor de drogas. Por esta razón la coordinación de la política es una responsabilidad del Ministerio de Salud. En el caso de Holanda, estamos orgullosos de que:

· La salud de los consumidores de drogas es relativamente buena,

· La mortalidad como consecuencia de sobredosis es baja,

· La difusión del virus del SIDA es limitada y

· El número de personas adictas a la droga es bajo en comparación con otros países europeos.

En el sistema legal holandés, se ha introducido un enfoque pragmático en la ley y en el proceso. Los usuarios de drogas no son considerados necesariamente como criminales por el simple hecho de que consumen droga.

La buena salud y bienestar de los individuos es la principal preocupación.

Ejemplos del enfoque de Reducción de Daños han sido hasta ahora:

· La existencias de cafeterías donde la venta de cannabis es semi-legal,

· Programas de mantenimiento con metadona para adictos a la heroína,

· Los programas de intercambio de agujas y jeringuillas,

· Y, más recientemente, el test químico de las pastillas de éxtasis.

La tolerancia social respecto a las drogas como el cannabis han ido creciendo desde la década de los ochenta. Lo mismo parece ocurrir en el caso del éxtasis. No obstante, a lo largo de los últimos años, ha habido un cambio político que ha dado lugar a un cambio en la tolerancia social, especialmente con respecto a los usuarios de la heroína. Principalmente, como resultado de una severa crítica exterior, la aproximación a los problemas de la droga en Holanda ha ido cambiando: se ha pasado de poner el énfasis en la reducción de daños al incremento de las medidas represivas. Hoy el dilema más importante parece ser: ¿Dónde se debería poner el mayor énfasis: en la reducción de daños o en la represión? Debido a los cambios en política, la opinión pública también ha cambiado. Actualmente el uso de drogas y el delito parecen ser sinónimos en la mentalidad pública. El uso de drogas se experimenta como una causa, directa e indirecta, de molestias, lo cual, en mi opinión, deja poco espacio para una política racional sobre drogas...”

Mike Bot, Los Dilemas Holandeses2002, Director General del Centro Maliebaan.

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